Postales de una vida sencilla.
Por Fernando López
A Verengo, el rincón rural de la provincia de Orense donde pasó su infancia y tiene sus raíces familiares, vuelve este joven cineasta gallego, llevado por la revisión de un viejo video casero que su padre grabó cuando él era chico y ya exhibía su atracción por las imágenes. Esa breve pieza nos introduce en esta sentida ópera prima documental que traduce en pinceladas sensibles y descriptivas la quietud de la vida diaria en esa aldea fiel a su cultura y sus hábitos. La cariñosa mirada de Seoane se concentra en el transcurrir del tiempo que pasa mientras la cámara sigue con callada discreción y especial aprovechamiento del fuori campo, los pequeños detalles de la acción y sobre todo los elocuentes silencios y los sonidos que desde la banda sonora definen un ambiente singular y también similar al de otras zonas de la campiña gallega.